Como siempre digo en redes, el lugar donde hay que ir a ver a los animales es en su propio hábitat, por lo que si sois amantes de la fauna marina, una gran idea es hacer un avistamiento en barco.
En el último workshop hicimos uno con Turmares, empresa que además de hacer avistamientos en el Estrecho de Gibraltar participa en proyectos de conservación e investigación, y cuenta en su equipo con biólogas precisamente para esto. Escogí esta empresa porque garantizaba un respeto a los animales. En primer lugar no te garantizan al 100 por 100 el avistamiento porque no van a perseguir a los animales ni a acosarlos como está ocurriendo en algunas zonas ya.
Los barcos le suponen un estrés a los animales, sobre todo si están criando, y varias embarcaciones les rodean. Además pueden causarle daños debido a las hélices. Para un correcto avistamiento se deberían cumplir las siguientes normas:
- Las aproximaciones se hacen siempre de forma lateral: nunca por delante ni se persigue a los animales desde detrás.
- Hay que dejar una distancia mínima de 60m (aunque a veces ellos mismos se acercan), por debajo de esta distancia se considera que estamos en zona de exclusión.
- Está prohibido encender la hélice o el motor mientras los animales están en la zona de exclusión, y hay que esperar unos minutos a que el animal o los animales se hayan retirado antes de
- Entre los 60 y 300 metros está establecida la zona de permanencia restringida: sólo puede permanecer la embarcación 20 minutos como máximo.
- La zona entre los 300 y 500m se considera de aproximación, por lo que si hay más de una embarcación realizando el avistamiento deben comunicarse por radio para efectuar cualquier maniobra con el menor impacto para los animales. Nunca se deben encerrar a los animales.
- Está prohibido navegar en círculo en torno a un grupo de cetáceos o limitar su movimiento.
- No se pueden hacer ruidos que alteren a los animales, tocarles o echar comida al agua.
- Si se observaron signos de alarma o cambios de comportamiento en un cetáceo o grupo de cetáceos, se abandonará el área móvil de observación de cetáceos, no queremos alterarles.
- Sólo un barco puede estar en la zona de aproximación sus 20 min, y de forma sucesiva dos seguidos sólo pueden estar un máximo de 30min.
Todo esto no son sólo recomendaciones, sino que existe un decreto que regula estas prácticas y que podéis consultar: Real Decreto 1727/2007, 21 de diciembre. BOE núm 11, 2008.
En el workshop Yolanda Rodríguez nos contó que ella misma durante su estancia en las Islas Canarias, donde el turismo en algunas zonas está poniendo en peligro a especies que se encuentran protegidas, comprobó que había registradas 81 embarcaciones para este tipo de actividades. Imaginad 81 barcos yendo todos en busca de los animales!! ¿Creéis que se cumple todo lo anterior?
Por esto antes de participar en alguna actividad de este tipo tenemos que asegurarnos que la empresa que lo haga realmente respete el medio ambiente. Como consejo: dar prioridad a empresas locales que tengan equipo científico, que no sean simplemente empresa (incluso multinacional) turística, puesto que pondrá en primer lugar a la fauna, no al turista. Normalmete cuando hay un equipo científico participan en proyectos de conservación e investigación, los avistamientos son sólo una parte de todo su trabajo y lo hacen de forma respetuosa.
Mientras tengan el permiso para hacer la actividad tantas embarcaciones será complicado pararlo, pero al menos podemos no colaborar en este tipo de prácticas. Un avistamiento bien hecho puede ser muy positivo: es la mejor forma de educar y concienciar, viendo a los animales en su hábitat natural. Os dejo algunas fotos de lo que vimos en Tarifa:
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